La confianza en uno mismo es un elemento fundamental en todos los ámbitos de la vida. Es la confianza en uno mismo lo que ayuda significativamente en el desarrollo de un profesional. Es lo que lo impulsa a tener el coraje de enfrentar la adversidad, además de ayudar con la motivación y el compromiso a través de la creencia positiva en su propio potencial de logro. Pero, como otros elementos y sentimientos, su exceso puede resultar muy perjudicial. Y es precisamente de estas pérdidas de las que hablaremos en este artículo.
La confianza en uno mismo excesiva puede no ser confianza en uno mismo
Primero que nada, sabemos que este artículo puede parecer confuso para quienes siguen nuestras publicaciones. Al fin y al cabo, uno de los beneficios que aporta la formación en Coaching a la vida de las personas es precisamente la autoconfianza. Y sí, es importante y beneficioso. Tener confianza es indispensable en varias áreas, especialmente para las carreras profesionales. Entonces, ¿dónde está el error? En exceso.
La confianza en uno mismo y la propia capacidad profesional son factores muy importantes. Sin embargo, cuando hay un exceso de confianza en uno mismo, puede haber pérdidas en su carrera. Generalmente, el amplio bagaje de experiencia en una determinada actividad puede terminar estimulando el exceso de confianza, lo que produce resultados negativos. La confianza en uno mismo puede verse (e incluso ser) soberbia, narcisismo, arrogancia, egoísmo.
Para que la confianza en uno mismo sea realmente beneficiosa, debe basarse en otros elementos. Por eso, además de la confianza en uno mismo es importante desarrollar la inteligencia emocional , que también es otro poderoso beneficio obtenido en la formación en Coaching. Pero si la excesiva confianza en uno mismo es mala, ¿cuáles son las pérdidas? Consulte el siguiente tema.
Las principales pérdidas del exceso de autoconfianza
Ahora que ya está claro que la autoconfianza es importante para tu vida y solo el exceso que es dañino, es el momento de conocer los principales perjuicios de esta excesiva autoconfianza.
A continuación se presentan algunas preguntas dañinas que puede causar el exceso de confianza.
1 – Falta de atención a los detalles
Cuando el profesional tiene demasiada confianza para realizar una determinada acción, corre grave riesgo de perder la concentración y la concentración en sus actividades. En ese sentido, entra en modo automático y simplemente actúa sin usar su sentido analítico. El resultado de esto puede ser muy catastrófico. Al entrar en este modo automático, el profesional, en consecuencia, pierde detalles que pueden comprometer la calidad del trabajo . El exceso de confianza trae cierta ceguera y esto compromete la toma de decisiones. Por tabla, también puede comprometer los resultados de la empresa además de las relaciones interpersonales en el lugar de trabajo.
2 – Exposición a riesgos
Los profesionales que realizan funciones operativas pueden sufrir daños físicos, exponiéndose a riesgos y accidentes fatales provocados por la simple falta de atención. Además, los profesionales que actúan directamente en la toma de decisiones pueden comprometer negativamente el desempeño de todo el equipo simplemente por no escuchar o por no prestar la debida atención a los factores que chocan con esta excesiva autoconfianza.
3 – Construyendo una imagen negativa y negociaciones frustrantes
Un profesional con mucha confianza puede parecer arrogante, lo que impacta negativamente en las relaciones interpersonales con los compañeros de trabajo. Además, esta actitud de excesiva confianza en sí mismo promueve un clima organizacional desfavorable e incómodo, que genera una caída en la motivación, productividad y resultados de la organización. Después de todo, a nadie le gusta trabajar con gente arrogante y desagradable, ¿verdad?
Además, el profesional puede hacerse daño durante las negociaciones, ya que puede parecer autoritario y hacer que el cliente cree una barrera que impida la aproximación y la empatía.
3 – Estancamiento profesional
Cuando el profesional está demasiado confiado, tiende a pensar que tiene un control total sobre la función que desempeña. Como consecuencia, este individuo pierde la oportunidad de evolucionar y acaba retrocediendo, ya que no le interesa seguir adquiriendo nuevos conocimientos sobre su campo de actuación. Así, entra en un proceso de estancamiento, lo que disminuye su desempeño y la producción de resultados. La excesiva confianza en sí mismo hace que este profesional se detenga a tiempo, pierda oportunidades reales de ascender en su carrera.
Por todo ello, es importante desarrollar la inteligencia emocional para que la autoconfianza tan deseada no se convierta en un problema real en tu carrera.
Ahora cuéntanos: ¿te consideras una persona segura de sí misma? ¿Considera que su confianza en sí mismo es excesiva o está en un límite saludable? Utilice el espacio a continuación para contar su experiencia y también su opinión sobre el tema.