En derecho comercial, la bancarrota es un proceso legal que ocurre cuando es imposible pagar las deudas de una empresa o persona.
Como funciona el instituto de bancarrota
La bancarrota ofrece al deudor, la empresa en bancarrota, la oportunidad de terminar sus actividades causando el menor daño posible a sus acreedores.
La solicitud de quiebra se basa en la satisfacción de todos los acreedores, de modo que cada uno recibe proporcionalmente parte del capital restante, de acuerdo con el monto adeudado.
Este principio, conocido como ” par conditio credititorium ” o principio de paridad, se usa en la ley como regla para la división de los acreedores sin que ninguno de ellos sea más beneficiado o perjudicado que los demás.
Además, este proceso ayuda a estructurar las relaciones comerciales mientras las empresas atraviesan este escenario dentro de la economía.
¿Cuáles son los procedimientos para la bancarrota?
La quiebra está dirigida a empresarios y empresas comerciales, que presentan una petición inicial que demuestra la imposibilidad de continuar con el negocio, conocida como la fase inicial o declaratoria.
La bancarrota también puede ser presentada por los acreedores de la compañía, accionistas de compañías limitadas, accionistas de compañías limitadas o cónyuge del empresario.
Después de la fase de declaración, el proceso pasa por la investigación, donde se deben determinar los motivos de la quiebra, así como analizar los activos y pasivos del negocio.
En la tercera fase, se realiza la liquidación, donde los activos vendidos pagan las deudas, terminando el proceso de bancarrota.
El proceso de bancarrota puede ocurrir durante el período en que la compañía también está en recuperación judicial, que también está regulada por la Ley de quiebras.