El asesoramiento financiero es el servicio proporcionado por un profesional que ayuda a su cliente a manejar sus finanzas y le asesora sobre sus inversiones. Este servicio también forma parte de la presentación de informes sobre tendencias económicas, cambios en la legislación y riesgos asociados.
Depende del asesor financiero (llamado asesor financiero o asesor financiero, en inglés) presentar toda la información de manera segura al cliente. Además, debe despejar todas las dudas para poder tomar sus decisiones conscientemente.
¿Cómo funciona el trabajo de un asesor financiero personal?
La consultoría financiera comienza con una reunión entre el consultor y el cliente. En él, el primer paso del asesor financiero es evaluar las necesidades del cliente y ayudarlo a planificar sus objetivos a corto, mediano y largo plazo.
A corto plazo, un asesor financiero personal puede evaluar las cuentas de su cliente para identificar dónde se necesitan cambios para acomodar un cambio de vida, como en el caso del nacimiento de un hijo.
Esbozar una estrategia para una jubilación pacífica es el tipo de ayuda que el consultor puede brindar a largo plazo.
Después de identificar las metas y necesidades de su cliente, el asesor financiero podrá recomendarle la combinación más adecuada de inversiones .
Es en esta etapa que el rol de educador del consultor es importante. Debería transmitir tanta información como sea posible sobre las opciones de inversión, sus ventajas y riesgos, y la situación económica actual.
Además de abordar las recomendaciones de inversión, los asesores financieros también pueden asesorar sobre impuestos, seguros y control de finanzas personales. De esta manera, es posible que sus clientes puedan separar una parte de sus presupuestos para invertir.
El trabajo de un consultor no termina cuando se configura el plan financiero. Idealmente, deberían realizarse nuevas reuniones para monitorear los resultados de las inversiones del cliente, el estado de sus cuentas y sugerir cambios , si es necesario.
Los ajustes son esenciales porque pueden cambiar tanto las circunstancias de la economía como los objetivos del cliente. Por eso es importante que el cliente y el consultor se reúnan al menos una vez al año para reevaluar la planificación realizada.
Consultoría financiera empresarial
Algunas consultorías financieras están especializadas en trabajar con empresas. Por lo general, una empresa contrata a un asesor financiero externo cuando necesita resolver un problema específico.
Este consultor que diagnosticará la situación, evaluará las posibles soluciones al problema y ayudará con su implementación. Es decir, al igual que con el asesoramiento personal, en las empresas, la consultoría financiera también suele desarrollarse en tres etapas: diagnóstico y planificación, ejecución y seguimiento.
En el caso de las micro y pequeñas empresas , la consultoría financiera puede ser muy útil para aclarar las dudas del administrador de negocios, que a menudo no es un gerente financiero profesional. El consultor puede ayudar a mejorar la estructura de gestión, creando mecanismos para que todas las transacciones se contabilicen correctamente.
Esto permitirá a la compañía tener un mayor control financiero y un mejor análisis de su flujo de caja, sabiendo identificar dónde están las deficiencias que le impiden obtener mayores ganancias .
Actualmente, se puede ofrecer asesoramiento financiero personal y comercial en un proceso de coaching. En este caso, el Entrenador y el Cliente establecerán estrategias a través de reuniones periódicas para trabajar en objetivos financieros.