Una de las bases del éxito de las empresas actualmente en el mercado es adoptar una cultura colaborativa entre sus empleados . El incentivo al intercambio de experiencias entre empleados tiene un impacto significativo en los resultados de los proyectos en diferentes áreas. La organización tiene mucho que ganar cuando cuenta con un equipo multifacético con habilidades complementarias.
Comprender la cultura colaborativa
El término cultura colaborativa se ha utilizado ampliamente en estos días y se refiere a la capacidad de los equipos para trabajar realmente juntos, con sus miembros exponiendo sus ideas entre sí y estando abiertos al punto de vista de los colegas. Durante mucho tiempo, se alentó a los profesionales a tener miedo de compartir sus conocimientos con otros porque creían en un potencial “robo” de ideas en este universo.
Establecer un ambiente de confianza y un buen clima organizacional es esencial para alentar a las organizaciones a ser más productivas. Así, con el tiempo, los empleados se sienten más integrados con la corporación y están aún más dedicados al desarrollo de sus actividades. Además de tener la oportunidad de ampliar el horizonte de conocimiento de todos, el entorno colaborativo también contribuye a la creación de un sentido de pertenencia.
Beneficios de la cultura colaborativa en el entorno empresarial
Los principales beneficios de la cultura colaborativa en una empresa destacan por el diálogo más profundo entre los miembros del equipo, así como el desarrollo de estrategias más alineadas con las principales necesidades. La autoestima de los empleados también se aprovecha cuando sienten que sus opiniones están contribuyendo a la mejora del conjunto.
El contacto más estrecho entre los empleados y el intercambio de ideas permite identificar cuestiones estratégicas que antes pasaban desapercibidas. Es posible identificar nuevos talentos e incluso observar el surgimiento de nuevos líderes . Un trabajo del día a día más enfocado a la integración de los empleados, permite lograr resultados aún más extraordinarios que los objetivos previstos.
7 consejos sobre cómo implementar la cultura colaborativa en la empresa
Después de leer los beneficios que la cultura colaborativa puede aportar a su organización, le gustará ver los consejos que he enumerado a continuación sobre cómo implementar este concepto. Es posible hacer más colaborativos los equipos multidisciplinares, adoptando algunos cambios en la vida diaria y logrando resultados más pertinentes.
1 – Fomentar la colaboración a través del entorno físico
Una forma muy eficaz de acercar a los empleados a su empresa es promover la interacción a través del entorno físico corporativo. Observa cómo es el diseño de espacios y lugares de trabajo hoy en día, ¿este espacio tal como es promueve la posibilidad de intercambio en el día a día? ¿Pueden las personas hablar entre sí y aprender sobre lo que otros están produciendo?
Muchas organizaciones han estado reconsiderando sus espacios de trabajo, exactamente para permitir que los empleados intercambien ideas sobre proyectos durante su ejecución. Disminuir la cantidad de particiones y paredes puede ayudar a que los empleados se sientan más predispuestos a interactuar con los demás. Sin embargo, es importante que este proceso no sea una experiencia traumática para quienes valoran su espacio.
Antes de impulsar la reforma estructural, el gerente debe hablar con los empleados y explicar cuáles son los objetivos y por qué es tan relevante repensar el espacio. Además, la nueva configuración debería brindar beneficios tangibles a los empleados, como un acceso simplificado a equipos comunes y un espacio más acogedor para el café.
2 – Valorar el trabajo en equipo
Se debe alentar a los líderes de equipo a que pongan más énfasis en realizar tareas en conjunto. Aunque una actividad puede ser realizada por una sola persona, vale la pena promover la interacción con uno o más colegas, con el objetivo de intercambiar perspectivas. En general, la principal barrera que enfrentan las organizaciones para alcanzar una cultura colaborativa es el hecho de que los empleados están muy enfocados en resolver los problemas corporativos por sí solos.
Paulatinamente, se debe inculcar el concepto de trabajo realizado por más de una persona para que tenga respuestas más variadas. El incentivo a las actividades realizadas por más personas es relevante para superar la dificultad de algunos profesionales para compartir el crédito con sus compañeros o simplemente para entender que sus ideas no serán robadas. Los gerentes deben reconocer el mérito de los resultados del equipo y demostrar que la organización está observando esta forma de trabajar. Cuanto más entiendan los empleados que pueden lograr mejores resultados trabajando juntos, más se unirán.
3 – Crea espacios habitables
Además de promover una mayor interacción durante el desempeño de las actividades laborales, es posible estimular una cultura colaborativa, creando espacios de vida. Básicamente, son espacios con elementos de confort, como sofás y sillones, para que las personas puedan sentarse y tener conversaciones personales. Fomentar momentos de intercambio personal es importante para fortalecer los lazos entre los empleados.
No subestime el poder de los lazos de simpatía que se crean entre los empleados, esta identificación personal contribuye a crear un ambiente de mayor respeto. Las empresas que no se preocupan por la relación personal entre los empleados pueden tener que enfrentarse a problemas bastante serios, como la aparición de chismes y quisquillosos. Además de sillones y sofás, puede ser legal invertir en actividades de ocio para estos espacios.
Algunos juegos rápidos, una pequeña biblioteca, cargadores de teléfonos móviles, entre otros, ayudan a desviar la atención de las conversaciones mezquinas sobre compañeros ausentes. Los malentendidos y los chismes nacen de entornos socialmente insalubres, en los que las personas no tienen una ocupación divertida y estimulante para su mente.
4 – Establecer metas claras para el equipo
Cuando cada miembro del equipo persigue un objetivo diferente, es difícil dirigir los esfuerzos hacia un punto común, que es la base para un trabajo más interactivo y colaborativo. Los gerentes deben comenzar a pensar en los objetivos como temas que abarcan al equipo en su conjunto. Por supuesto, cada miembro o núcleo del equipo puede tener sus metas específicas, sin embargo, el grupo debe tener una meta general, el objetivo central del esfuerzo de todos.
La meta general debe subdividirse en metas que sean más simples de lograr y esas metas deben definirse como metas de los miembros del equipo. Tener una herramienta de gestión de proyectos, que permite a todos los miembros seguir el desarrollo del trabajo de los demás, contribuye a un mayor sentido de equipo y colaboración. El líder debe alentar a los empleados a tomar la iniciativa para ayudar a los colegas identificando las dificultades de su parte para lograr lo propuesto.
5 – Recompensas para equipos
Han pasado años desde que la motivación de los empleados se ha convertido en un punto muy importante a discutir sobre el crecimiento de las empresas. Sin embargo, este proceso de estimular una mayor y mejor productividad se ha centrado cada vez más en los equipos en su conjunto. Antes, era común que los empleados que más se destacaban en el contexto general recibieran la recompensa.
Esta metodología generó una intensa competitividad entre los empleados y, actualmente, existe la percepción de que es más válido premiar a los equipos exitosos en su conjunto. Durante todo el año, es posible mantener a los empleados comprometidos en el desempeño de sus actividades ofreciendo una recompensa al final del período.
6 – Diálogo
Para que la cultura colaborativa se implemente con éxito en su empresa, es importante fomentar el diálogo entre los empleados, tanto de forma horizontal como vertical. Básicamente, esto significa promover un entorno más accesible, en términos de diálogo entre los empleados del mismo nivel jerárquico y los gerentes con cargos superiores.
Las organizaciones que mantienen muy marcada la separación por jerarquías, pierden oportunidades de intercambio y exponen temas clave para ser transformados. Si hubiera un contacto más estrecho entre los empleados que están en primera línea a diario y los líderes de la industria, sería posible encontrar soluciones mucho más prácticas y efectivas. Quienes no actualicen esta visión de la reducción de jerarquías pueden terminar rezagados.
7 – Utiliza la tecnología a favor
Es poco probable que las empresas que ven las tecnologías como aplicaciones de mensajería como villanos promuevan una cultura colaborativa entre sus empleados. Aunque hay casos en los que los empleados se vuelven menos productivos, debido al uso excesivo de aplicaciones y sitios web, no se puede generalizar.
El punto central de esta pregunta es saber orientar el uso hacia algo relevante, es decir, incrementar la productividad en el día a día. Las aplicaciones de mensajería pueden ser muy útiles para resolver problemas prácticos que surgen durante la ejecución del proyecto. Es posible reemplazar el uso de una aplicación de mensajería convencional con una aplicación de perfil corporativo, por ejemplo.
La cuestión es pensar estratégicamente cómo las soluciones con sesgo personal pueden integrarse con éxito en la rutina diaria del trabajo. También es importante asesorar a todos sobre la importancia del uso consciente de la tecnología para mejorar sus resultados.
¿Te gustaron estos consejos sobre cómo implementar una cultura colaborativa dentro de tu empresa? ¿Tiene algún comentario que agregar? ¡Deje su contribución en el espacio de comentarios a continuación y recuerde compartir el artículo en sus redes sociales!