La tunneling es un tipo de fraude financiero realizado en empresas. La operación consiste en la manipulación de activos y ganancias por parte de un accionista mayoritario o ejecutivo superior, cuyo propósito de la acción es aumentar su ganancia personal.
Un ejemplo común de tunelización es la venta de partes de la compañía a un precio muy bajo a otra compañía, que generalmente tiene los mismos miembros en su junta directiva o familiares de estas y otras personas que prestan sus nombres para evitar impuestos y tarifas y / o problemas legales relacionados con el comprador de facto.
Este tipo de recurso se usa generalmente por razones impositivas o para manipular el mercado de valores.
El término se utilizó por primera vez en la República Checa en la década de 1990, un período en el que el sistema bancario local colapsó. Muchas instituciones financieras estaban en bancarrota, y resultó que los propietarios de estas compañías pasaron gran parte de su patrimonio corporativo a otras compañías, la mayoría de ellas en el extranjero.